La Vía de la plata a su paso por Cáparra |
Vista aérea del yacimiento de Cáparra |
Pero antes de
caer en el olvido en torno al siglo IX, Cáparra fue una ciudad que gozó de
buena salud en gran parte debido a su condición de paso obligado. Su origen
etimológico, que parece hacer referencia a un lugar de intercambio, nos da
pistas de la importancia del municipio en transacciones comerciales en el
contexto de la Vía de la Plata. Pero desde luego, lo que nos deja claro que
Cáparra fue una ciudad notoria en tiempos romanos son sus espléndidas ruinas
que ya empezaron a despertar el interés de eruditos locales y estudiosos
nacionales hacia el siglo XVII.
Tetrapylum. Se observan en primer plano los pedestales para esculturas. |
La parte superior
del arco, con la que se estima que alcanzaría trece metros de altura, cinco más
que en la actualidad, ha desaparecido. Tan sólo se conserva un núcleo de opus
caementicium que hoy en día corona en el monumento. Los arqueólogos suponen que
ese tramo del edificio estuvo compuesto por un arquitrabe, un friso con
cornisa y quizás un ático.
Gracias a las
inscripciones epigráficas que se conservan en el arco sabemos que quien mandó
erigir el monumento, Fidius Macer, cumplía los deseos testamentarios de sus
progenitores, Marcus Fidius Macer, un destacado ciudano del municipio, y
Bolosea. La inscripción rezaba lo siguiente:
BOLOSEA(E) FIDI(O)
PELLI F. MA(CRI. F)
M. FIDIVS MACE(R EX)
TESTAMENTO F (C)
"Marco Fidio Macer, erigió este monumento, según testamento, en honor de Bolosea, hija de Pellio y de Fidio, hijo de Macer"
Otros elementos arquitectónicos que nos ayudan a revelar la importancia pretérita de Cáparra son sus termas públicas, un edificio de planta cuadrada compuesto por varias dependencias. Asimismo, en el centro de la ciudad, que estaba totalmente amurallada, se encuentra el foro al que se accedía a través de tres puertas y donde se encontraba la basílica, la curia y tres templos. También es posible que el municipio contara con un anfiteatro y un acueducto. Además en una campaña arqueológica se halló un miliario de época de Nerón que indica la distancia desde el lugar hasta Emérita Augusta.
Cáparra comenzó
a perder importancia a fines del Imperio romano, pero el tránsito de la
Antigüedad a la Edad Media y los cambios poblacionales que se produjeron en
este contexto asestaron el golpe definitivo a esta ciudad y con él se
inició la larga agonía que finalizaría antes de la llegada de los musulmanes a
ese área de la Península. No obstante, posiblemente, el abandono del otrora
destacado municipio romano ha permitido la conservación de su monumento más
destacado, el arco cuadrifronte, único de esta tipología en España.
Las
ruinas de Cáparra bien merecen una visita. Cerca
del yacimiento hay un centro de interpretación. En
esta web encontraréis muy buenas fotos sobre de los restos arqueológicos y en
este video podéis haceros
una idea de cómo era el arco en época romana.